Las lavandas le dan su toque violeta a los jardines, los hoteles y al paisaje local y el aroma invade las calles del pueblo. Micaela Tittarelli, una joven que nació en la ciudad, creó un vínculo íntimo entre la naturaleza y el bienestar a través de su inspirador proyecto El destilador; se dedica a destilar plantas con propiedades medicinales, tanto nativas como introducidas y transformarlas en aceites esenciales, cremas y ungüentos.
En su búsqueda por descubrir los secretos de la naturaleza, han realizado innumerables pruebas y mejoras en el proceso de destilación para obtener los aceites más puros y efectivos con un fuerte respeto por la Naturaleza.
En la actualidad sus destilados capturan las esencias de las famosas lavandas, de àrboles como cipreses y eucaliptos y de la paramela, considerada una de las plantas ancestrales de la Patagonia, además realizan destilados de plantas aromáticas que ellos mismos cultivan. Cada destilación es una sinfonía de fragancias naturales, una manifestación de la dedicación y el amor que Micaela y su familia han invertido en este emprendimiento.
¿Te imaginás llevarte de recuerdo un pequeño frasco con aceite esencial de lavanda de El Calafate?. A sus productos los podés encontrar en el Mercado Santacruceño, y en otros locales de la ciudad o bien adquirirlos en su tienda on line.
En resumen, El Destilador es mucho más que una marca de aceites esenciales; es una expresión de respeto por la naturaleza y una conexión con la comunidad.
